Este nuevo vehículo espacial está diseñado con el objetivo que pueda ser utilizado tanto en misiones en el espacio profundo, vuelos espaciales tripulados y poner en órbita satélites para futuras megaconstelaciones, las cuales tendrán necesidades de lanzamiento especiales.
La estructura de Neutron estará compuesta por una nueva aleación de carbono especialmente formulada para hacerla más liviana, fuerte y que pueda soportar el intenso calor y las fuerzas de lanzamiento y reentrada que se requieren para habilitar vuelos frecuentes.
En su mayor parte este vehículo espacial será reutilizable con algunas partes que se desecharán después de cada viaje. Además, en un sólo lanzamiento podrá transportar hasta 15 toneladas a la órbita baja de la Tierra, pero si se lanzan múltiples cargas el peso se reduce a 8 toneladas.
Su diseño contempla una forma cónica con una parte inferior ancha, esta proporcionará una base sólida y estable durante el aterrizaje. Con ello se eliminará la necesidad de mecanismos intrincados y patas de aterrizaje, así como la demanda de una infraestructura compleja y voluminosa de lanzamiento.
Asimismo, se reducirán los altos costos asociados con plataformas y operaciones de aterrizaje en el océano, pues la parte de Neutron que regresará a la Tierra volverá al mismo sitio en donde fue lanzado.
Lo que hace especialmente al diseño de este cohete, según la firma, es que sigue los principios de ‘Hungry Hippo’. Por esta razón, en lugar de que una parte de la estructura se separe de la otra al llegar al espacio y caiga hacia el océano –como lo hacen las naves espaciales tradicionales– éste únicamente abrirá una especie de mandíbulas en el carenado para soltar la carga útil, y luego se volverá a cerrar antes de regresar a la Tierra casi listo para volver a ser lanzado.